Nervios a flor de piel, verano a la vuelta de la esquina
Perdón a los poquitos que seguís esta historia por habeos abandonado estas dos semanas.
Me veo obligada a contestaros dos preguntas cruciales:
1. ¿Qué narices has estado haciendo que nos has olvidado?
Esta es fácil. Me temo que tremendamente fácil. He estado sin Internet. Lo sé, lo sé. Escusa típica que se suele decir cuando el bloguero se ha quedado sin argumentos. ¡Pero es que es así! ¡Lo siento yo más que nadie!
2. Vale, cariño, vé al grano. ¿Se ha roto la apuesta durante este tiempo?
Veamos... se ha roto otra cosa que no es la apuesta. Mi relación con Jose ya no existe. Supongo que al leer estas líneas no podréis evitar que vuestro duendecillo del hombro izquierdo os susurre: "claro, cómo se va a mantener una relación sin sexo".
Mi duendecillo ya se planteó eso hace tiempo. Pero gano el del lado derecho, que me insinuó que cuando no nos apetecía hacerlo es porque en el fondo había un problema de orden mayor. Creo que éste último es el argumento clave. No es normal tantos celos por mi parte, ni tampoco tanta independencia por la suya. No se puede sacar amor de donde no lo hay, y hasta que no hice esta apuesta no me di cuenta.
3. ¿Pero sigue ahora el blog o no sigue?
No lo sé, creo que todo depende de que mi vida sea lo sufucientemente interesante. No me apetece aburríos con los típicos "¿por qué ha fallado mi relación?". Yo misma lo descubriré este verano y a la vuelta os lo cuento... o no...
1 comentario
CHEWIE -
ESPERO QUE CONTINUES ESCRIBIENDO!
SALU2